El cambio climático es uno de los desafíos más urgentes que enfrenta la humanidad en el siglo XXI. Sus efectos no se limitan únicamente al medio ambiente, sino que también afectan de manera significativa a la economía, la sociedad y, por supuesto, a las organizaciones. Aunque el cambio climático es un fenómeno natural que ha ocurrido a lo largo de la historia, los cambios actuales están sucediendo a una velocidad y magnitud alarmante. A medida que las condiciones climáticas se vuelven más extremas y los recursos naturales más escasos, las organizaciones deben adaptar sus estrategias y operaciones para enfrentar estos desafíos. Incorporar el cambio climático en el análisis de contexto de la organización no es solo una medida preventiva, sino una necesidad para asegurar la sostenibilidad y resiliencia a largo plazo.

En este contexto, la implementación de las normas ISO se convierte en una herramienta clave para las organizaciones que buscan mejorar su desempeño y cumplir con las expectativas de sus partes interesadas. A continuación, se detallan los cambios y consideraciones clave para la integración del cambio climático en la gestión organizacional conforme a las nuevas cláusulas 4.1 y 4.2.

Conforme a la cláusula 4.1, que es de carácter obligatorio, las organizaciones deben determinar si el cambio climático es una cuestión relevante en su contexto. Esto implica una reflexión profunda sobre cómo los riesgos y oportunidades asociados al cambio climático podrían afectar la organización, ya sea en términos de operaciones, finanzas, cadena de suministro o relación con sus partes interesadas.

Por otro lado, la cláusula 4.2, aunque optativa, invita a las organizaciones a considerar las expectativas y requisitos de las partes interesadas en relación con el cambio climático. Esto puede incluir expectativas de los clientes, proveedores y la comunidad en general.

Incorporar estas consideraciones fortalece la reputación y competitividad de la organización en un mercado cada vez más consciente del impacto ambiental.

La actualización sobre el cambio climático afecta a 31 normas ISO. Entre esas normas se encuentran las más utilizadas e implementadas en todo el mundo: ISO 14001, ISO 9001, ISO 45001, ISO 50001 e ISO 14090.

Implementación de la nueva enmienda

Para integrar de manera efectiva esta enmienda en la organización, es necesario adoptar un enfoque estratégico que contemple los siguientes pasos:

  1. Considerar los impactos a corto, medio y largo plazo.
  2. Evaluar cómo los cambios climáticos pueden afectar la oferta de la organización.
  3. Tener en cuenta el impacto en toda la cadena de suministro y en las actividades de adaptación y mitigación.
  4. Valorar cómo estos impactos pueden influir en los ingresos y gastos.
  5. Identificar y priorizar los riesgos y oportunidades relacionados con el clima.
  6. Desarrollar un plan de acción para gestionar tanto los riesgos de transición como los físicos.
  • Riesgos de transición: surgen al avanzar hacia una economía baja en carbono, presentando desafíos en la adopción de tecnologías limpias y la adaptación a nuevas regulaciones, pero también oportunidades para innovar y liderar en sostenibilidad.
  • Riesgos físicos: relacionados con los impactos directos del cambio climático, como temperaturas más altas, cambios en la precipitación y eventos extremos. Se dividen en:
  • Riesgos agudos: eventos climáticos puntuales y de gran impacto, como tormentas o sequías severas.
  • Riesgos crónicos: cambios graduales pero persistentes, como el aumento del nivel del mar o la desertificación.

En resumen, la inclusión del cambio climático en el análisis de contexto organizacional no solo es una exigencia normativa, sino una oportunidad estratégica. Además, aunque no se exige la realización de un cálculo de huella de carbono, se espera que las organizaciones reflexionen sobre cómo el cambio climático puede afectar sus operaciones y qué medidas pueden tomar para mitigar estos riesgos y aprovechar las oportunidades emergentes. Así, las organizaciones certificadas en ISO pueden demostrar su compromiso con la sostenibilidad y su capacidad de adaptación en un mundo en constante cambio.

Plazo para la implementación de la enmienda de cambio climático en la empresa

La nueva enmienda es de aplicación inmediata, aunque en 2024 se está concediendo un periodo de adaptación para que las empresas la implementen en sus sistemas. A partir de 2025, sin embargo, será auditada como en aquellos sistemas implantados de acuerdo a las Normas ISO mencionadas anteriormente.

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